Por Luis Martínez Alcántara
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reportó una pérdida de 45,624 empleos formales en mayo de 2025, marcando la mayor caída para este mes desde que se tiene registro, excluyendo el periodo de la pandemia. Este descenso representa el segundo mes consecutivo con cifras negativas, luego de que en abril se eliminaran 47,442 plazas laborales. La situación actual refleja una tendencia preocupante en el mercado laboral mexicano.
La disminución en mayo se atribuye principalmente a factores estacionales, especialmente en el sector agropecuario, donde las fluctuaciones en el ciclo agrícola afectan la contratación. El IMSS señaló que la pérdida se concentró en empleos temporales, con 45,084 puestos eliminados, mientras que las plazas permanentes registraron una reducción de 540 empleos.
Expertos advierten que, aunque las causas estacionales son comunes en estas fechas, la magnitud de las pérdidas laborales en abril y mayo de 2025 supera las cifras de años anteriores. Esto sugiere una debilidad estructural en la creación de empleo formal, posiblemente influenciada por una desaceleración económica y una menor inversión en sectores clave como la manufactura y la construcción.
En el primer trimestre de 2025, el empleo formal creció un 1%, sumando 226,731 nuevos puestos de trabajo, según datos del IMSS. Sin embargo, esta cifra quedó por debajo de las expectativas de especialistas, que estimaban al menos 250,000 nuevas plazas para ese periodo.
La situación actual plantea desafíos significativos para el mercado laboral mexicano. La necesidad de políticas públicas que fomenten la creación de empleo formal y sostenible se vuelve urgente. Además, es esencial fortalecer los mecanismos de protección social para mitigar los efectos de la pérdida de empleos y garantizar el bienestar de los trabajadores afectados.
