La icónica banda mexicana Maná, reconocida como una de las más influyentes en el rock en español, ha iniciado su gira ‘México lindo y querido’ en Barcelona, marcando su regreso a la península ibérica tras seis años de ausencia. El concierto, llevado a cabo en el Palau Sant Jordi, ofreció un espectáculo lleno de canciones memorables y un vibrante rock que encantó al público.
El evento comenzó con las primeras notas de “Manda una señal”, desatando un estruendo de entusiasmo en la montaña de Montjuic. La banda continuó con “De pies a cabeza”, adaptada con una mención especial a Barcelona que elevó aún más la euforia del público. Fher Olvera, el vocalista, emocionó a los presentes con interpretaciones de “Corazón espinado” y “Labios compartidos”, dedicando esta última a un amor del pasado.
Uno de los momentos más destacados del concierto fue cuando Maná interpretó “¿En dónde jugarán los niños?”, acompañada de un discurso ecologista de Olvera y una representación de un incendio forestal que fue apagado en el escenario. La balada “Vivir sin aire” destacó por la emotiva ejecución en armónica de Olvera, mientras que “Mariposa traicionera” y la ranchera “Se me olvidó otra vez” hicieron bailar a todo el Palau. “Oye mi amor” dividió al público en dos mitades para corear la canción, creando un ambiente de camaradería y diversión.
El baterista Álex González, conocido como ‘El Animal’, impresionó con un solo de batería después de interpretar “Me vale”, demostrando su increíble energía y habilidad.
Para cerrar el concierto, Maná deleitó a Barcelona con algunos de sus éxitos más icónicos: “En el muelle de San Blas”, “Clavado en un bar” (durante la cual cayeron sujetadores al escenario) y “Rayando el sol”. La banda se despidió del Palau Sant Jordi con sus 17,000 localidades vendidas, consolidando un éxito que promete repetirse en las diez ciudades que forman parte de la gira ‘México lindo y querido’.
Por Luis Martínez Alcántara.
