Por Luis Martínez Alcántara
El exlanzador de los Dodgers, Julio Urías, se encuentra nuevamente en el ojo del huracán luego de la difusión de un video en el que se observa agrediendo a su pareja. El incidente ocurrió en septiembre de 2023 afuera del estadio BMO, tras un partido de fútbol entre el LAFC y el Inter Miami.
La polémica ha generado dudas sobre el futuro de Urías en la Major League Baseball (MLB), ya que podría enfrentar una nueva sanción por violencia doméstica.
En el video, que fue revelado recientemente por el diario Los Angeles Times, se puede ver a Urías empujando a su pareja contra una valla y posteriormente tirando de ella por el cabello o los hombros. La agresión escaló cuando el exlanzador intentó propinar un golpe fuerte con su mano izquierda, mientras era inmovilizado por el personal de seguridad del estadio.
Este material fue grabado por un testigo anónimo y está en manos de la Patrulla de Carreteras de California (CHP), lo que ha reavivado la polémica sobre el comportamiento del pelotero.
El arresto de Urías, que ocurrió el mismo día del altercado, se dio bajo sospecha de un delito grave de violencia doméstica. A pesar de que en su momento Urías se declaró inocente de un cargo menor de agresión doméstica, el video parece reforzar las acusaciones en su contra, lo que ha llevado a una nueva investigación tanto por parte de las autoridades como de la MLB. Hasta la fecha, la liga no ha emitido un comunicado oficial, pero se espera que pueda tomar medidas disciplinarias.
Si la MLB decide sancionar a Urías nuevamente, sería el primer jugador en la historia en recibir dos suspensiones bajo la política de violencia doméstica y agresión sexual de la liga. El lanzador, de 28 años, ya había sido suspendido en 2022 por un incidente similar, y esta segunda sanción podría representar un golpe definitivo para su carrera profesional. Desde el altercado en 2023, Urías no ha vuelto a jugar en las Grandes Ligas.
La carrera de Julio Urías, quien fue pieza clave en el campeonato de la Serie Mundial de los Dodgers en 2020, se encuentra en peligro. La revelación de este video no solo pone en duda su futuro en la MLB, sino que también daña gravemente su imagen pública y personal, mientras que las autoridades y la liga continúan investigando el caso.