Por Luis Martínez Alcántara
CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente de Colombia, Gustavo Petro, desató una fuerte polémica al proponer la elección de jueces por voto popular, una idea que hace eco de la reforma judicial en México.
Durante la posesión de la magistrada Elizabeth Becerra Cornejo, Petro destacó que este modelo de elección ya se ha planteado en México y sugirió que podría ser una opción para Colombia. Sin embargo, admitió que no estaba completamente seguro de si este es el mejor camino a seguir, subrayando la necesidad de que las instituciones jurídicas evolucionen y no se queden estáticas.
Petro justificó la idea afirmando que existe una desconexión entre el deseo de cambio del pueblo y las doctrinas jurídicas tradicionales. Señaló que, al igual que en México, esta iniciativa surge de una insatisfacción con las decisiones del Poder Judicial y de un deseo de que las instituciones sean más representativas de los intereses populares.
Diversos sectores en Colombia expresaron su preocupación ante la propuesta. Expertos como el exfiscal Francisco Barbosa advirtieron que la independencia judicial podría verse comprometida si los jueces son elegidos por voto popular, ya que estarían sujetos a presiones políticas y populistas. Otros críticos señalaron que este tipo de cambios podrían alterar profundamente el equilibrio de poderes en el país.
Petro ha tenido desacuerdos con el Poder Judicial en varias ocasiones y esta propuesta parece ser un intento de resolver esas tensiones. En su discurso, mencionó que la relación entre la justicia y el Ejecutivo ha sido mediáticamente traumática, pero abogó por un diálogo con las Altas Cortes para transformar el sistema judicial colombiano.
En México, la reforma judicial que incluye la elección popular de jueces generó también divisiones y se espera que las primeras elecciones se realicen en 2025. Petro aludió a este contexto, sugiriendo que Colombia podría aprender de la experiencia mexicana mientras reflexiona sobre su propio sistema.
