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Por Abel López Jiménez

Miguel Ángel Mancera Espinosa inició a tambor batiente su campaña proselitista en busca del voto ciudadano en el VII Distrito Electoral Federal con jurisdicción en la Alcaldía Gustavo A. Madero, que lo lleve a ganar la diputación Federal por la coalición Va Por la Ciudad de México (PAN-PRI-PRD).

Su partido, el PRD, lo registró en la lista de candidatos plurinominales, lo que le garantiza de antemano llegar como diputado federal, pero prefirió hacer proselitismo a ras de tierra porque que tiene el acercamiento y arraigo con los ciudadanos de esa demarcación, quienes lo conocen de sobra desde que fue Jefe de Gobierno de la capital, porque ahí inauguró numerosas obras.

Mancera Espinosa, actual Senador de la República y coordinador de la bancada del PRD, ya está perfilado para liderear la eventual fracción parlamentaria del Sol Azteca en la Cámara de Diputados, pues va por el cargo por dos vías: la plurinominal y la campaña proselitista en territorio. Esa es su garantía.

Por eso, en lugar de esperar el nombramiento en sus oficinas, prefirió hacer proselitismo 90 días para visitar a los habitantes de las 80 colonias que abarca el citado distrito electoral federal en la segunda demarcación más grande de la capital que alberga a un millón 200 mil habitantes.

Recorre en promedio tres colonias diarias, donde se reúne con grupos de 40 o 50 vecinos para dialogar y escuchar sus demandas y sugerencias, en lugar de realizar actos masivos costosos que luego son difíciles de justificar, además de evitar los famosos acarreos de gente.

Con su conocido estilo reservado evita la polémica o la crítica estéril hacia sus adversarios políticos y, cuando lo hace, tiene las bases para hacer señalamientos puntuales por su vasta experiencia política y como Doctor en Derecho que es.

Por eso su papel es muy distinto al que escogieron los dirigentes más importantes del Frente Amplio por México, quienes prefirieron la vía plurinominal (los que no hacen campaña) que les garantizará representar a sus partidos en la Cámara de Diputados.

Inicialmente, Mancera Espinosa formó parte del bloque de aspirantes a la Presidencia de la República por el PRD al lado de Silvano Aureoles, ex gobernador de Michoacán. La historia de esa contienda es de sobra conocida. El ex Jefe de Gobierno fue postulado por el PRD para ese cargo, por lo que se asume plenamente perredista.

El eslogan de su campaña proselitista es #ManceraEnTuCasa, un símil de El Médico en Tu Casa, programa exitoso de su administración que fue aprobado por la mayoría de los legisladores del hoy Congreso de la Ciudad de México, impulsado por la entonces presidenta de la Comisión de Salud, Nora Arias Contreras, actual presidenta del PRD en la capital del país.

Mancera no tiene duda de que conseguirá el voto de los electores en el populoso suburbio del norte de la capital del país, que colinda con los municipios Netzahualcóyotl, Ecatepec y Tlalnepantla del Estado de México. Por eso empezó a pedir el voto de los vecinos de su Distrito.

El también ex procurador general de justicia de la Ciudad de México, no se sorprendió de los problemas que enfrentan los habitantes de esa zona y por eso inició escuchando y recogiendo las primeras impresiones de los ciudadanos en materia de seguridad, salud, educación vivienda, obras viales, entre otros problemas.

Por eso el estilo de Miguel Ángel Mancera Espinosa es muy distinto al resto de aspirantes a cargos de elección popular, alejado de eventos multitudinarios, de los famosos acarreos y templetes ostentosos, con el fin de escuchar de cerca las demandas y sugerencias ciudadanas.

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