Boxeo-olimpico

La decisión de la boxeadora italiana, Angela Carini de abandonar su combate contra Imane Khelif, quien representa a Argelia en los Juegos Olímpicos de París, reavivó la polémica sobre la participación de atletas con características genéticas masculinas en categorías femeninas.

Carini se retiró tras recibir varios golpes contundentes en el primer round, generando reacciones de apoyo y críticas a nivel internacional.

La boxeadora, visiblemente afectada, explicó que decidió retirarse debido al intenso dolor tras los golpes recibidos, afirmando que su salud estaba en riesgo.

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, presente en París, expresó su desacuerdo con la inclusión de Khelif, señalando que el combate no se desarrolló en condiciones justas.

Meloni declaró que “las atletas con características genéticas masculinas no deberían competir en categorías femeninas” calificando la situación como una burla para el deporte olímpico.

Imane Khelif, una de las boxeadoras cuya elegibilidad para competir fue cuestionada debido a elevados niveles de testosterona, fue recibida con aplausos por numerosos seguidores argelinos en París.

El Comité Olímpico Argelino defendió a su atleta, alegando que es víctima de “mentiras y ataques poco éticos”.

Por su parte, el Comité Olímpico Internacional (COI) respaldó la participación de Khelif y otra boxeadora taiwanesa, Yu Ting Lin, ambas descalificadas anteriormente en el Mundial de 2023 por no cumplir con los criterios de elegibilidad de género.

De acuerdo con el COI, todas las competidoras en la categoría femenina cumplen con las reglas de elegibilidad, aunque reconocen que las pruebas de testosterona no son perfectas.

Esta situación ha generado un amplio debate sobre la participación de atletas con características genéticas masculinas en categorías femeninas, recordando casos como el de la atleta Caster Semenya.

Figuras públicas como la tenista Martina Navratilova y la escritora J.K. Rowling también se pronunciaron en contra, criticando la decisión del COI y cuestionando la equidad en el deporte femenino.

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