CIUDAD DE MÉXICO.- En un ambiente de acusaciones y controversias, el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana se encuentra envuelto en un escándalo por presuntas violaciones electorales. La dirigencia nacional, encabezada por Ricardo Aldana, fue señalada por la disidencia sindical de adelantar ilegalmente los procesos electorales, saltándose los estatutos establecidos y convocando elecciones de manera prematura.
Cristina Alonso García, representante de la disidencia, alertó sobre este “madruguete sindical” que, según afirma, sigue los pasos de prácticas antidemocráticas del pasado ligadas al PRI. Alonso García denunció que las elecciones se han convocado tres meses antes de lo estipulado por los estatutos, generando múltiples protestas y quejas en más de 26 secciones del sindicato.
La controversia crece ante la proximidad del cambio de gobierno, con la toma de posesión de Claudia Sheinbaum Pardo como presidenta de México. Se espera una intervención del secretario del Trabajo, Marath Bolaños, quien ha sido instado a investigar las irregularidades y asegurar que se respeten los procedimientos democráticos en el sindicato petrolero.
Los estatutos indican que las elecciones seccionales serán dentro de un periodo de 90 días anteriores al inicio de su ejercicio, esto es debieron ser convocadas luego del 1 de octubre, pues quienes son elegidos, asumen funciones el primero de enero de 2025 y durante dos años. Pero el primer paso de estas violaciones ya se dio precisamente en esos comicios, pues de manera anómala las realizaron anticipadamente el 15 de julio.
El resultado son múltiples inconformidades en al menos 26 secciones, quejas surgidas a partir de “una convocatoria express”, pues se llevaron a cabo con una convocatoria al margen de la ley, realizada tres meses antes de lo que marcan los estatutos, reclamó Alonso García.
